Cada vez son más los consumidores que apuestan por este tipo de energía de origen renovable por varias razones:
Cada vez son más los consumidores que apuestan por este tipo de energía de origen renovable por varias razones:
Disminución del impacto negativo en el medio ambiente
Múltiples aplicaciones
Reducción de la dependencia energética
Bajo coste
Actualmente, la energía solar fotovoltaica es una de las energías renovables más destacadas que existen en el mundo. Se emplea para generar energía limpia a partir de la radiación solar. Lo que hace es aprovechar la energía que procede directamente del sol para producir electricidad gracias al efecto fotovoltaico.
A la hora de decidirse por su instalación debemos ser conscientes de sus múltiples ventajas, algo que ya ha tenido en cuenta un gran sector de la población mundial. De hecho, no hay duda de que, como energía renovable, la fotovoltaica posee las características necesarias para liderar el sector eléctrico.
La forma de obtener este tipo de energía se ha ido perfeccionando con el transcurso del tiempo. Actualmente, una gran parte de los recursos energéticos mundiales proceden de la energía fotovoltaica, y lo que es mejor, se encuentra en continuo crecimiento.
Para llevarlo a buen término es de vital importancia la instalación de paneles fotovoltaicos, responsables de producir electricidad a través de los rayos solares. También resulta esencial el tipo de estructura, pues aprovechar de una forma más eficiente los rayos del sol dependerá del lugar donde se lleve a cabo la instalación y la forma en la que se instalen los paneles fotovoltaicos.
La estructura y soporte de los paneles y placas solares fotovoltaicas es algo esencial para aprovechar al máximo el rendimiento de los rayos de sol. En realidad, existen varias variables a tener en cuenta que influyen en su instalación, como la orientación y ubicación del lugar de montaje, el ángulo, el tamaño de la placa, o el tiempo o las horas de sol diarias. De esa manera, para instalar eficientemente tanto los paneles como las placas fotovoltaicas es de vital importancia conocer con exactitud todos los aspectos que intervienen en el proceso.
Dependiendo del lugar y del tipo de superficie sobre el que se instalen los paneles solares, se optará por estructuras para cubiertas o estructuras para suelo.
ESTRUCTURAS PARA CUBIERTAS
Sistema Bulnes
Sistema Gulpiyuri
Sistema de Picos
ESTRUCTURAS PARA SUELO
Sistema Cantábrico
Sistema Muniellos
Los tipos de paneles solares están definidos por las células fotovoltaicas montadas, y se distinguen tres categorías:
Los inversores son los encargados de transformar la corriente eléctrica continua producida por los paneles fotovoltaicos en corriente alterna, de forma que sea apta para el consumo corriente.
A la hora de elegir un inversor solar hay que tener en cuenta varios factores, como la similitud entre los paneles instalados, la posibilidad de una ampliación de la instalación fotovoltaica o la potencia instalada.
Para que su funcionamiento sea eficiente debe rendir en un rango amplio de potencias, su consumo sin estar conectado a una carga debe ser bajo, tiene que aguantar corrientes de pico y contar con sistemas de seguridad.
La función del regulador es proteger la batería de las sobrecargas y los excesos de descargas, posibilitando así una mayor vida útil de la misma. Por lo tanto, su instalación debe realizarse entre el panel solar y la batería.
En la zona de carga, se ocupa de ofrecer la suficiente carga al acumulador evitando situaciones de sobrecarga, mientras que en la fase de descarga evita la descarga excesiva de la batería.
La energía fotovoltaica utiliza la luz solar que le llega para transformarla en energía eléctrica. Esta energía renovable y limpia genera múltiples beneficios, principalmente en lo que se refiere al ahorro y al medioambiente, de ahí que muchas personas hayan considerado su instalación para sacar el máximo partido a sus viviendas o empresas.
Instalar energía fotovoltaica es una apuesta de futuro segura al poseer una serie de ventajas determinantes y eficaces frente a otras fuentes de energía. Como hemos podido observar, la relevancia de la energía fotovoltaica es cada vez mayor, rompiendo récords año tras año.
Fuente de energía renovable, no contaminante e inagotable
Los paneles solares no precisan métodos químicos que contaminen. De hecho, esta energía frena la generación de elementos perjudiciales o residuos que de otra forma son liberados a la atmósfera.
La energía fotovoltaica se convierte así en un sistema renovable que permite evolucionar hacia un futuro energético sostenible liderado por el autoconsumo y la no generación de emisiones CO2.
Instalación sencilla y ahorro considerable
Ideal para zonas rurales y con muchas horas de sol al año
En determinadas zonas aisladas resulta muy compleja la instalación de una red eléctrica y hacer llegar la energía puede repercutir en el precio final. Por eso, con la instalación del sistema fotovoltaico se consigue que determinados lugares de difícil acceso puedan ser abastecidos de electricidad de una forma autónoma.